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Blog El atril

Fray Antonio Praena Segura, OP

de Fray Antonio Praena Segura, OP
Sobre el autor

27
May
2008
La mujer más bella del mundo
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Hace unas semanas se presentaba la publicación de las cartas dela Madre Teresa de Calcuta. Estoy deseando leer el volumen, titulado Ven, sé mi luz.

 

Al parecer, la Madre Teresa habla en ellas de la oscuridad con que vivió su fe. Nada extraño, en principio, si pensamos en la oscuridad esencial que acompaña a la fe y que tanta más oscuridad es cuanto más vamos creciendo en la fe. De lo contrario, no sería fe. No hay más que echar un vistazo a la vida de los grandes santos y místicos de siempre.

 

En este blog hablamos de belleza, de cultura y de arte en su relación con la fe. Casi nunca tocamos asuntos políticos, sociales o eclesiales de rabiosa actualidad. Pero me llamó la atención que en la noticia alguien llamara ala Madre Teresala mujer más bella del mundo. ¡Qué importante es en tiempos en que tanto se olvida la belleza verdadera!

 

Y algo más: tanto más puro y gratuito es el amor cuanto menos a nosotros nos reporta beneficios. En un tiempo del sentir, del querer a Dios por lo que me da, por lo bien que me hace sentir, por lo que me tranquiliza, por lo mucho que me a mi me dice, me emociona, me llena, me me me a mi a mi a mi a mi... ¡qué lección la de esta mujer que amó a los últimos de los últimos sin más retribución personal, ni siquiera interior! ¡Que amó a Jesús hasta el extremo, sin ni siquiera sentir su consuelo interiormente!

 

No digo que no sea necesario sentir a Dios. Sólo describo que sucede a sus santos el no sentirlo... porque ¡está tan cerca, que hasta de mí me olvido! Y que no hay amor más bello que este tan extraño... quizá por su extrañeza impredecible.

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14
May
2008
Mi prima y yo
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Ha muerto Rauschenberg. Es considerado uno de los artistas clave del arte de la segunda mitad del siglo XX, siendo la figura que permite entender el paso del expresionismo abstracto americano al arte pop. Su obra es tan importante como difícil de clasificar: ¿pintura, escultura, fotografía, collage, instalación...? Cuando era estudiante, la precariedad económica le llevó a introducir todo tipo de residuos de la calle en sus creaciones, desarrollando así un lenguaje propio que con el tiempo devino en un género nuevo.

Leyendo sobre él, han venido a mi memoria las aventuras de mi prima y yo para ser artistas. Ella estudiaba Bellas Artes y yo quería seguir sus pasos. Los dos nos pateábamos Granada recogiendo todo tipo de basuras para convertirlas en arte. Jugábamos, sin saberlo, a ser Rauschenberg. A mi siempre correcta tía se la llevaban los demonios porque, según ella, en nuestra vocación artística actuábamos como pordioseros y basureros. Algunos de nuestros hallazgos no eran para menos. Hasta prohibió meter en casa ciertas suculentas piezas que hoy harían las delicias de cualquier descreído coleccionista. En su cruzada por hacernos desistir hasta intentó que mi prima diese de baja su matrícula en la facultad aduciendo la inmoralidad de que posaran chicos y chicas completamente desnudos. No lo consiguió y mi prima hoy no es Rauschenberg pero sí profesora de pintura en un instituto. Su primera decisión como directora del mismo ha sido pintar paredes y columnas de colores chillones. Mi tía se siente orgullosa por fin.

 

En cambio yo, ni siquiera aspirar a Rauschenberg de tercera categoría pude. Cuando llegó el momento, me presenté a las pruebas de bellas artes. Durante la prueba de escultura, consistente en realizar en barro una obra libre, esculpí la figura de una mujer desnuda sentada en el suelo. Mi prima, ya por entonces acabando la carrera, se coló en el aula y me dijo: es muy clásica. En Granada les gustan las cosas más rompedoras. Como ya no había tiempo para hacer otra cosa, se me ocurrió morder mi escultura por diferentes lugares. Ni corto ni perezoso, le tiré varios bocados a la mujer de barro, quedándome con la boca caníbalmente roja de arcilla. Ni siquiera así entré en Bellas Artes. Se ve que Dios me reservaba otros caminos.

 

Moraleja: con cualquier cosa se puede crear algo, si no bello -que también- sí comunicativo, sugerente, interesante... Con los vericuetos de nuestra vida, Dios puede hacer también su obra de arte. Hasta de nuestro residuo de vivir y las basuras de nuestro corazón puede sacar Dios su maravilla.

 

No creo que Rauschenberg le tomara la idea a Dios. Pero sí que Dios hasta de Rauschenberg se vale para decirnos algo, para hacer brillar su gloria.

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12
May
2008
predicar pintando
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Maria Teresa Peña Echeveste es una pintura de la luz. En diversas publicaciones religiosas se ha hablado de su obra últimamente, con ocasión de una exposición en la catedral de Burgos. Por ello, aquí queremos traer la originalidad de su lenguaje. Ha sabido encontrar la manera de que el estilo lleve al contenido.

 

Cuando nos encontramos ante una obra de arte, una de las cosas primeras a tener en cuenta es si hay armonía y correlación entre el contenido (el mensaje de lo que se quiere expresar) y el lenguaje utilizado para ello. Por ejemplo: si el formato, la manera de componer y distribuir las figuras y el espacio, los colores, la intensidad de la luz, la regularidad o irregularidad de los perfiles, la violencia o suavidad de los claroscuros, el pulso del trazo, etc, están, ya de por sí, mostrando qué quiere decir el artista con lo que pinta y, aunque lo pintado sea lo mismo de siempre –un paisaje, un Ecce Homo, una Anunciación- qué aspecto de esto mismo es, aquí, ahora, para esta artista, para mí, lo que se quiere subrayar por encima de lo demás.

 

Peña Echeveste lo consigue en sus cuadros. Basta mirarlos. Y ahora, hagamos el intento de llevar lo dicho sobre la pintura al terreno de la predicación. Fray Luis de Granada enseñaba que a través de la práctica hay que hacer naturales todos estos recursos expresivos en la predicación: el tono de la voz, el grosor y color de las palabras, el ritmo, las frases incisivas, los contrastes, el factor sorpresa, los cambios bruscos, las comparaciones, las repeticiones, lo términos cultos, los términos coloquiales...

 

Que el arte enseñe al arte. Que estos cuadros nos enseñen a predicar más expresivamente para que el mensaje se grave en el corazón más que la pintura en la retina.

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30
Abr
2008
Mascaró en Silos
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El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía ha organizado en el Monasterio benedictino de Silos una exposición de esculturas y dibujos de Xavier Mascaró.

Es la exposición número 23 que el MNCARS organiza en este monasterio, convirtiendo este espacio en un lugar que, sin dejar de ser un espacio para el encuentro personal con Dios, para la consagración de la existencia sin resquicio a Dios, sea un ámbito para el arte.
 
El Abad ha declarado que es una muestra que realmente impresiona y que espera que el visitante salga de ella enriquecido. Por su parte, el director del Reina Sofía manifiesta que exponer en un contexto así es algo único, porque no se trata de un mero espacio, como los museos, donde la obra queda aislada de cualquier referencia espiritual y temporal. Es un lugar con historia, con símbolos que dotan al espacio de sentido.
 
Los artistas suelen quedar prendados de nuestros antiguos conventos. Y, si estos siguen siendo un lugar de culto y de entrega a Dios, más aún. Parece que captan algo, que la belleza de la casa creada les sigue hablando de la belleza de las almas que la construyeron, de la belleza de la alabanza para lo que la construyeron, de la belleza de Aquel para entregarse al cual nacieron estas galerías, patios, capillas, bóvedas...
 
Pero ¿quién entregaría su tiempo sin fisura a la Belleza absoluta? Mascaró es un artista del hierro. ¿Quién se dejará fundir por el amor de Dios en obra de compasión, de mansedumbre, de dulzura, de integridad, de paz, de recta intención... de santidad, en definitiva? ¿Ayuda una obra de arte a convertirse?
 
Si la santidad alumbra el arte, el arte debe alumbrar santidad. Pero ¿no nos parece anticuada la palabra santidad a los mismos que vivimos en edificios que se levantaron para ello? ¿Tendrán los tiempos que desamortizarnos esta palabra, como fueron desamortizados los edificios, para poblarla de contenido, como han sido iglesias y conventos convertidos en espacios para el arte, la contemplación... la belleza?

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18
Abr
2008
Todos estamos invitados
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Todos estamos invitados es el título de la última película de Manuel Gutiérrez Aragón. Junto a él, firma el guión Ángeles González Sinde, la presidenta de la Academia de las Artes Cinematográficas. Parece como si al cine español, tan criticado por salir a la calle para algunas causas y no para otras, criticado por su silencio políticamente interesado para con el terror y la extorsión terroristas, le hubiera llegado de pronto la necesidad de redimirse y, con esta película, hubiera optado por tomar partido clara y decididamente a favor de las víctimas del miedo, la amenaza y la persecución.

 

La película se moja, ciertamente. Sus intenciones son valientes. No quiere centrarse sólo en las víctimas o en los asesinos, sino, sobre todo, en tanta gente que mira para otro lado. Bienvenida sea al séptimo arte la valentía (algunas excepciones sí que había, pienso en el excelente documental de Elías Querejeta Asesinato en febrero).

 

Pero el resultado deja bastante que desear. El guión está mal hecho: es previsible, deja lagunas importantes. Los personajes son planos, llegando a tópicos y perdiendo credibilidad. Parece como si estuviera escrita con demasiada prisa e intención de salir al paso de las acusaciones de, pues eso, mirar también a otro sitio... Repito que la misma presidenta dela Academiafirma el guión. Los diálogos están sobrescritos sobre los labios de los personajes. Estos dicen lo que les han puesto, y en lo escrito habla demasiado el yo del director y la guionista.

 

Pero insisto: la película es valiente. Es clara. Es directa. Es necesaria. Para ser vista y ser hablada. Para sentir el miedo, la falta de libertad, el vivir con la vida escoltada, con impotencia. Para vivir una vida en la que te hacen el vacío, te tratan con ira impune, se meten en tu casa para que tú salgas de ella. Para poner en imagen y sonido la mentira, enrocada sobre sí misma como la serpiente etarra... Pero también para sentir a los que resisten.

 

Y me despido con un ejemplo de entrevista capciosa, mal hecha, malintencionada, inobjetiva... Les copio un trozo de la entrevista hecha por El País al director del film. Habla por sí misma:

Pregunta. En su película, y siempre dentro de ese enfoque descriptivo o didáctico, el personaje del cura resulta especialmente despreciable por adoptar deliberadamente esa siniestra actitud ante lo que ocurre. Es de un fariseísmo tan perverso como fácilmente comprobable en buena parte del clero y la jerarquía eclesiástica vasca.

Respuesta. Por una vez, voy a defender a la Iglesia vasca. Tenga usted en cuenta que la represión franquista afectó también al nacionalismo vasco, al democrático y al totalitario. De esa igualdad de represión a unos y otros han venido no pocos equívocos heredados en la época democrática. ¿Se acuerda usted de cuando nosotros, en el franquismo, llamábamos a los chicos de ETA valerosos luchadores por la libertad de Euskadi? Aquí hay para todos. Recuerde usted también que muchos de los hoy perseguidos por ETA colaboraron en publicaciones abertzales. Nadie tiene obligación de ser profeta, pero por lo menos hay que tener memoria.

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14
Abr
2008
Del idealismo al consumismo
1 comentarios

 

 

La publicidad es una expresión artística característica de nuestro tiempo. Su arte consiste en incitar, de la manera más original y efectiva, hacia un determinado comportamiento o una determinada acción.

 

Revista FPLes comento un anuncio que, con sentido de la ironía, nos ilustra un asunto importante para los cristianos. La revista FP anunciaba, con la imagen que les pongo aquí, su último número, dedicado al mayo del 68. Los artículos de esta edición analizan qué queda de aquellos ideales y cómo el consumismo ha ido ganando para su causa a no pocos de los que en su juventud militaron en los diferentes frentes en que se combatía en nombre de la libertad. Yo no lo viví, faltaban unos años para nacer, pero muchas veces he conversado con los hermanos sobre cómo el escenario que a mi generación y las generaciones más jóvenes que la mía nos toca vivir es diferente al que vivieron nuestros padres o los frailes que nos preceden en una cierta edad.

 

Si el Evangelio ha de tener en cuenta el contexto en que se predica, creo que, desde el punto de vista religioso, en el contexto español, europeo, occidental, democrático, liberalizado, consumista... (otros contextos son otra cosa) la misión del cristianismo no será primeramente la de comenzar por romper supuestas opresiones familiares, políticas, sociales, de clase o falta de libertad de pensamiento, opción política, religiosa o moral,... cuanto la de liberar a la persona de la esclavitud de vivir sin Dios o de espaldas a él, que es, si queremos ir al fondo de las cosas, la fuente principal de la infelicidad humana desde la antropología cristiana y su primado de la persona. Pues son las personas las que hacen las estructuras y las estructuras sólo pueden cambiarse desde el cambio en las personas. Sólo después de esto, que supone conversión poco a poco del corazón, podrán cambiarse realmente el mundo y las ideas.

 

El escenario de la predicación ha cambiado, para bien o para mal. Basta añadir una lista de precios a una fotografía para ilustrar en qué sentido cambian los tiempos: del idealismo al consumismo. Pero ilustrado con gracia.

 

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2
Abr
2008
Picasso en el Reina Sofía
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“Gritos de niños gritos de mujeres gritos de pájaros gritos de flores gritos de maderos y de piedras gritos de ladrillos gritos de muebles gritos de camas de sillas de cortinas de cacharros de gatos de papeles gritos de olores que se arañan gritos de humo...”
Pablo Picasso
 
            A veces, lo de menos es que nos guste mucho o poco un artista. Es probable que Picasso no sea del agrado de todos, que incluso haya personas que queden con muy mal sabor de boca después de ver una obra suya. Ello es comprensible y hasta es lo normal, porque la belleza es difícil, como decía Platón, y además tiene caminos extraños.
 
            El arte no siempre tiene que buscar crear belleza.
 
            Tampoco resulta interesante la fealdad por la mera finalidad de provocar, llamar la atención o hacerse pasar por genio. Pero parece que el arte antes surge de la necesidad de comunicar, especialmente aquello que es más difícil de comunicar -entre ello lo espiritual, lo religioso- que de la intención de recrear la mirada. En este sentido, hay artistas que son capaces de abarcar la amplia gama que va desde la belleza por la belleza a la expresión de lo más horrible con la intención de conmover, provocar la reflexión, provocar la reacción, suscitar inquietud, molestar, denunciar, despertar ámbitos dormidos de la conciencia, enriquecer los recursos expresivos y comunicativos... etc.
 
            La exposición que de Picasso encontramos hasta el 5 de Mayo en el Museo Reina Sofía es, en este sentido, única. Se trata de los fondos del Museo Picasso de París junto con la colección que el mismo Reina Sofía tiene del artista malagueño. Una ocasión irrepetible. La recomiendo encarecidamente, porque es la crónica de un siglo y porque después de Picasso la pintura ya no será la misma. Lejos de la pedantería, reconozco que por primera vez he podido comprender realmente el cubismo. Además, tras hacer el esfuerzo de verla entera y seguir las explicaciones, te das cuenta enseguida de que Picasso toca los diversos estilos que encontraremos en el arte de su época y abre bastantes nuevos territorios que aún hoy son explorados.
 
 
 
 
 
 
 
            Quizá la personalidad de Picasso no sea ejemplar. Si nos ponemos así, tampoco lo era la de Lope de Vega, Quevedo, Miguel Ángel, Tiziano... Muchos teólogos son importantes por abrir a la razón puertas hacia Dios. En qué medida ellos se acercaron a Dios por esos mismos caminos, es algo de lo que cada uno personalmente deberá dar cuentas a Dios. Como debe dar cuanta cada cristiano, cada predicador, cada teólogo... Cada artista.

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12
Mar
2008
Sacra neteja
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            Sin afán de polémica, pero sabiendo que dará que hablar, las Escuelas Pías de Gandía han encargado al Pintor gandiense Joan Costa la obra Sacra Neteja (Sacra limpieza. El día siguiente). Los escolapios dejaron al artista libertad para desarrollar su obra y han recibido con agrado la entrega de esta pintura que refleja el trabajo de las mujeres en el escenario en que Leonardo da Vinci situó su famosa última cena.

 

            Santas, reinas, monjas y nobles damas atestan el repertorio iconográfico de la Historia de la Pintura, explica el pintor, que ha querido representar un acontecimiento histórico nunca tenido en cuenta, inadvertido y ninguneado.

 

            El padre escolapio Enric Ferrer asegura que la acogida ha sido muy buena y que el arte tiene que ayudar a reflexionar y que estamos en el siglo XXI y hay que interpelar en esta época. La polémica está en el ojo del espectador, y es el espectador el que pone un añadido, un positivo o un negativo. La Iglesia somos todos y, en esa complejidad de la Iglesia, caben todos -concluye el religioso.

 

            ¿Será así realmente? Debemos ser capaces de dialogar e intercambiar opiniones en la garantía de la comunión eclesial, y nada mejor que una obra de arte para dejarse interpelar y así ir creciendo hacia la verdad, que, aunque ya la tenemos dicha y completa en la revelación de Jesucristo, es una verdad que ha de alcanzar a todas las instancias de nuestra vida y a todos los interrogantes de cada momento histórico.

 

            El cuadro es sincero y tiene las mejores intenciones. Desde el punto de vista artístico, dialoga y homenajea a los grandes de la historia del arte: unas mujeres cuelgan tapices en un guiño a Las hilanderas de Velázquez. Por una puerta a la derecha se deja ver un huerto lleno de luz mediterránea y de sombras amoratadas que recuerda a Sorolla. Unos cacharros colocados limpia y mansamente son una referencia moderna al Zurbarán más ascético. Otra de las mujeres que seca platos ensimismada nos recuerda a Gala en los retratos de Dalí.

 

            El autor espera que el cuadro vaya cobrando distintas lecturas con el paso del tiempo y permanezca así como una obra viva. No matemos nosotros la alegría de opinar en la libertad de sabernos hijos de una Iglesia madre de todos los que tienen fe.

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6
Mar
2008
Conciencia en llamas
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            Este domingo era el último día de la exposición dela V Edición del Premio Club de Arte Paul Ricard, en el Centre del Carme del Museu de Belles Arts de Valencia. Le había prometido a un conocido que iba a ir a ver su obra para comentarla con él.

            La muestra reúne 16 pinturas elegidas de un total de 150 provenientes de toda España. La obra ganadora es Conciencia en Llamas, de la artista valenciana Mery Sales. No es el cuadro que más me gustara, en principio. Pero en una segunda vuelta esta pintura me empezó a inspirar.

            El cuadro representa algo así como un bosque de árboles incendiados. Todo está pintado en rojo. No hay otro color que el rojo en todo el cuadro. De una manera muy suelta, los supuestos árboles arden. Junto a ellos, pegada a ellos, casi conteniendo el empuje de la masa arbórea, hay una valla que los rodea. Por el tratamiento de la pintura vemos claramente que esa valla es tan de madera como lo son los árboles: la valla de contención está a punto de echar a arder furiosamente con el bosque que contiene. Conciencia en llamas.

            A veces la conciencia entra en llamas y es devorada por aquello que contenía. Y el fuego ya no tiene control y va a arrasarlo todo. Nos va a calcinar por completo.

            La razón de ello es que la conciencia que contenía el incendio está hecha de la misma materia que el bosque incendiado. Va a arder con él porque ha nacido de él. Como en nosotros tantas cosas arden con nosotros cuando algo de nosotros arde porque están hechas de nosotros mismos.

            No quiero pensar más en ese cuadro. Llegó un punto en que comenzó a turbarme, como si yo mismo fuera a explotar en llamas de repente. ¿De qué será metáfora este cuadro? ¿Qué otra lectura diferente encierra y no puedo encontrar?

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25
Feb
2008
4 meses. 3 semanas. 2 días
1 comentarios

 

 

          En la escena más dura se oye cómo el feto envuelto en una toalla resbala por el conducto de la basura. Después hay un silencio.

 

            Música no hay nunca.

 

            No sabes en ningún momento si la película está a favor o en contra del aborto. La vida cotidiana puede ser terrible y lo sórdido puede dejar de serlo para convertirse en habitual. De alguna manera, todos son víctimas y todos son verdugos.

 

            La luz es siempre deficiente y la cámara al hombro hace temblar las escenas con un pulso orgánico, corporal; con un pulso humano. Pero de pronto hay una escena en la que la cámara no se mueve durante muchos minutos. Es que a veces hay que moverse para entender lo que está pasando y otras veces hay que pararse a contemplar el mundo sin pestañear. En eso la película es grande, porque el cine no es otra cosa que aprender a mirar.

 

            4 meses

            3 semanas

            2 días no es una película que te emocione. Simplemente es tan lista que se instala en tu realidad y no se marcha de ti durante mucho tiempo. Y, si encima tienes fe, te dan ganas de rezar por los personajes, como si los personajes existieran.Claro que ¿qué es existir?

  

 

 

Y en la última escena asistes a una conversación en primerísimo plano. Aunque de pronto, no: unas luces de faros de coches se reflejan en la pantalla y la cámara retrocede y te das cuenta de que no, que tú no estás en la conversación, que no la entiendes, que hay un cristal por medio en el que la calle y el trasiego se reflejan. Y la película te acaba mirando a ti que estás fuera.

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