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Oct2011Filosofía para masas
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  Aparte del parecido del nombre del filósofo con el de la marca en cuestión, ¿porqué Aristóteles con adidas? ¿Por la comodidad de su pensamiento y su realismo cognoscitivo tan pegado a la pista?
Aparte del parecido del nombre del filósofo con el de la marca en cuestión, ¿porqué Aristóteles con adidas? ¿Por la comodidad de su pensamiento y su realismo cognoscitivo tan pegado a la pista?
¿Hegel con Honda por aquello de la imparable carrera de la Historia, se ponga por delante quien se ponga? Y Heidegger, ¿con Hyundai por lo de la apertura a eso del horizonte del ser, tan del gusto oriental, oye, tan desasidamente leve y alternativo a la onto-"tecnología" occidental? Lo de Nietzsche con Nike estaba claro: esa imagen feroz contra los límites establecidos, ese superhombre propulsado por fosforescentes Nike-Air al olimpo: ...si hay dioses, ¿por que no puedo ser uno de ellos? Lo de Rousseau con la Renault estaba claro teniendo en cuenta la ascendencia franco-helvética de este buen hombre. Pero lo de Wittgenstein con Wilkinson, ¿cuestión de ser un caballero (para con la verdad, claro)?
En todo caso estoy en total desacuerdo con lo de Descartes y Decathlon: ¿un señor que ve el mundo y a sus paisanos desde la ventana de su gabinete, sin moverse de su cogitans ego, puede ser el fichaje estrella de una cadena de artículos deportivos? No sé, podían haber puesto a Camus, que fue futbolista.

 Leía ayer un artículo de Pérez Reverte en el que, a propósito de su visión de un joven leyendo, dejaba un comentario sobre el futuro del libro. No cree que el libro impreso esté amenazado por las nuevas tecnologías, los ciberlibros, los i-pad y demás nuevas formas de edición.
Leía ayer un artículo de Pérez Reverte en el que, a propósito de su visión de un joven leyendo, dejaba un comentario sobre el futuro del libro. No cree que el libro impreso esté amenazado por las nuevas tecnologías, los ciberlibros, los i-pad y demás nuevas formas de edición. 
 la historia apisona nuestros cuerpo en su avance. Y, aunque esta idea le pareció fatalmente hegeliana, algo de verdad había en ella.
 la historia apisona nuestros cuerpo en su avance. Y, aunque esta idea le pareció fatalmente hegeliana, algo de verdad había en ella.  Me envía mi vecino de blog, Martín, unas páginas que ha considerado de mi interés. Se trata de unos párrafos del libro La estrella de la redención, de
Me envía mi vecino de blog, Martín, unas páginas que ha considerado de mi interés. Se trata de unos párrafos del libro La estrella de la redención, de  Los días de verano son propicios para releer libros que nos habían dejado un buen sabor de boca. Lo he hecho con La gravedad y la manzana, un poemario de
Los días de verano son propicios para releer libros que nos habían dejado un buen sabor de boca. Lo he hecho con La gravedad y la manzana, un poemario de  Józef Baran ha explicado en qué consiste para él la diferencia entre lo intelectual y lo espiritual en el ámbito de lo poético expresando, a la vez, su fe en un principio ordenador del mundo. Ha clasificado a los poetas en dos tipos: los brujos y los magos. Según él, los primeros transforman el mundo en un cruel relato sobre el absurdo de la existencia y aterrorizan a sus lectores con casi cualquier cosa. Los segundos, en cambio, convierten el mundo en una totalidad llena de sentido y dejan un espacio a la esperanza creadora.
Józef Baran ha explicado en qué consiste para él la diferencia entre lo intelectual y lo espiritual en el ámbito de lo poético expresando, a la vez, su fe en un principio ordenador del mundo. Ha clasificado a los poetas en dos tipos: los brujos y los magos. Según él, los primeros transforman el mundo en un cruel relato sobre el absurdo de la existencia y aterrorizan a sus lectores con casi cualquier cosa. Los segundos, en cambio, convierten el mundo en una totalidad llena de sentido y dejan un espacio a la esperanza creadora.