BN en Facebook

Acertado el artículo de ayer de Milagros del Corral en la tercera de ABC. Milagros del Corral es la última directora de la Biblioteca Nacional, cargo del que ha dimitido al ser la BN degradada de Dirección General a Subdirección, precisamente cuando esta institución –la 4ª Biblioteca Nacional más importante del mundo- se prepara para celebrar su 3er centenario y cuando, gracias a la impecable y por todos reconocida gestión de del Corral- está en un momento de excelente proyección.

Conocidas son también las derivas –o sin derivas- por las que ha atravesado esta biblioteca en la etapa anterior: la decisión de su anterior directora, nada más llegar y porque sí, de quitar de en medio la estatua de algún personaje, los robos de los mapamundis… A del Corral se la eligió por su perfil como bibliotecaria de carrera y conocedora de la institución, dejando de lado la tradición de poner al frente de la misma a un escritor más o menos afín al gobierno de turno.

En el artículo de ABC la exdirectora habla de ética, estética y cosmética: la crisis que vivimos viene acompañada de una crisis de valores. Y así, las decisiones éticas y estéticas han sido sustituidas por decisiones cosméticas o de maquillaje político.

Del Corral aludía al inesperado apoyo que la BN ha encontrado en las redes sociales, especialmente entre los jóvenes, a quienes apunta como más sensibles al cambio de paradigma que estamos viviendo de lo que muchos pudieran pensar.

Me alegro. Porque es verdad. Hay algo nuevo: un hartazgo de la religión consumista que hace a muchos jóvenes buscar nuevas fuentes para su sed, y una nueva libertad libre tanto de progresismos de mastercard como de meapilismos de sacristía –o de despacho político, jeje-.