May
Amigo y hermano Lobato
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"La cultura es lo que el arte añade a la naturaleza, que es la misma en todos los que recibimos el ser y la sangre."
Abelardo Lobato
Después de una noche en vela y un día muy triste, creo que ya puedo hablar de ti como hablaba contigo, pues nunca ha habido entre nosotros patetismo ni tristeza, incluso al compartir momentos amargos, que hemos tenido alguno.
Así es que, como sé que estás a salvo, bien cuidado y que te vas a hacer querer en seguida por Quien no ha hecho otra cosa que quererte siempre, en realidad soy yo el que te pide que me eches un vistazo desde el cielo de vez en cuando, por si me descarrío, que ya tú bien sabías lo que dice Platón de nosotros los poetas.
Cuando tengas texto nuevo sobre tus experiencias y conversaciones en el Paraiso mándamelo, que te lo corrijo –ya está en imprenta lo último que organizamos juntos: elegí la portada que te gustaba menos, espero que me lo perdones-. Y si al pobre Dios le da la tentación de la tristeza –tal como vamos no me extrañaría-, llévatelo un ratito de paseo y así practicas latín, o alemán o italiano o francés… o el idioma del silencio, que es tantas veces el idioma de los amigos y en el que todo se comprende.
En fin amigo: que te voy a echar mucho de menos; pero la vida es un ratito y, además, no importa, como decía el otro Antonio. Tú espérame, porque no pienso ir al infierno y en el purgatorio ya me conocen.
Dejo aquí un fragmento tuyo que ha puesto en Facebook Vicente Niño, que se siente orgulloso de haberte tenido de maestro un verano en Granada. Creo que te retratas mejor y además incluyes eso que decía Aristóteles que forma parte de la belleza: totalidad –a la que añado: y movimiento-.
"Ulises tiene su Odisea, dejó Ítaca y se dio a la navegación por el mar de las culturas. Yo lo imito bastante, pero en este tiempo del primer verano del tercer milenio lo he seguido más de cerca, haciendo del caminar el camino, experimentando que no sólo el camino es difícil, sino que lo difícil es en verdad el camino de la vida. Me he convertido en auténtico viajero: a pie y a caballo, en auto y en tren, en nave y en avión, usando todos los medios del transporte actual, por tierra, mar y aire, más allá del Mediterráneo, y de las columnas de Hércules, por el Atlántico y el Pacífico, en el viejo y el nuevo mundo, en los dos hemisferios terrestres y en el mismísimo Ecuador, y he sentido anhelos de volar a la Luna y a Marte... Quien me diera alas como de paloma... y volaré"
fr. Abelardo Lobato OP